No todos los medios desinforman


A pesar de la fuerte crítica que suponen estas páginas, no podemos olvidarnos de que hay buen periodismo, y que este es necesario. A diario muchos periodistas se esfuerzan en hacer un buen trabajo, encontrándose frecuentemente con las prácticas empresariales de las corporaciones de la comunicación, que censuran o alteran noticias y titulares para no incomodar a la audiencia y, especialmente, a los anunciantes.

En nuestro caso nos gustaría destacar algunos periodistas y medios que han hecho bien su trabajo.

Tras la acción (diciembre 2018)

  • La primera investigación sobre el tour vino de la mano de Sato Díaz en cuartopoder.com. Da cuenta de la autoría, intención y tratamiento mediático. «Los medios en ningún caso han rectificado», apunta pocos días después del lanzamiento de la web.
  • Juan Soto Ivars habló del tour en TV3 también en diciembre de 2018, y más adelante recogió el proceso judicial en varias ocasiones en su columna en El Confidencial.

Tras la acusación (marzo 2019)

  • Sonia Peralta se hizo eco del proceso judicial en fantasticmag.es, poniéndolo en contexto en marzo de 2019.
  • Tras las filtraciones de la abogada a la prensa, Noelia Ramírez ofreció un amplio análisis en Smoda y Rafa Ordóñez dió el punto de vista de Homo Velamine en El Independiente.

Tras la sentencia del juzgado de primera instancia (diciembre 2019)

Tras la sentencia del Tribunal Supremo (diciembre 2020)

  • Alberto Torres y Àlex Gutiérrez vuelven a dedicarle una columna en Valencia Plaza y Ara.cat respectivamente.
  • Juan Soto Ivars (diversos medios), Rebeca Argudo (La Razón), Germán M. Teruel Lozano (Letras Libres) y Jimina Sabadú (El País) lo nombraron en sus columnas sobre Hasél y la libertad de expresión.
  • El periódico anarquista sevillano El Topo Tabernario y la editorial Stirner nos ofrecieron sendos espacios.

La mayoría de estos casos están promovidos por periodistas particulares, a menudo con una relación previa con Homo Velamine, y se posicionan a nuestro favor. Otros son más objetivos y simplemente ofrecen correctamente una información más completa. María Bastarós propone la visión más crítica, en una reflexión exhaustiva y pertinente.

Nos gustaría mencionar especialmente el caso de Diario Vivo, una sesión de periodismo oral en el que diversas historias son narradas en directo por sus protagonistas. Lo organiza un grupo de profesionales de la comunicación, que nos ofrecieron la posibilidad de contar el caso del tour apenas unos días antes del juicio y nos guiaron con mimo para transmitir la historia de la forma más asequible.

Entre el público de Diario Vivo se encontraban multitud de periodistas, entre ellos el redactor de El País que nos propuso entrevistarnos infructuosamente. Otro era un presentador de un programa de máxima audiencia de la SER, que se acercó al escenario tras acabar el espectáculo. Estaba entusiasmado con la historia y nos ofreció un espacio generoso en su programa. Aceptamos de buen grado, pero tras intercambiar un par de emails quedó en el limbo. Días después su cadena publicó la misma desinformación que el resto de medios.